Escribo este artículo La Inflamación y el Cáncer porque esta última palabra, trae a mi memoria lo que viví como mi madre cuando la diagnosticaron con cáncer de hígado y así se los compartí en el artículo que escribí hace exactamente un año, El cáncer no significa que acabó todo.
Un año después, sigo pensando que el cáncer puede ser visto como una oportunidad de vivir experiencias nuevas y de resignificar nuestra propia vida. Cuando uno o alguien cercano, es diagnosticado con esta enfermedad todos empezamos a ver la vida desde otra perspectiva y más allá del resultado o desenlace, nunca volveremos a ser lo mismos y esto es por lo general, algo positivo.
La inflamación y el cáncer
El cuerpo humano es el mejor ejemplo de trabajo en equipo, todo está interconectado así externamente no parezca, entonces quiero explicarte cómo funciona el cuerpo naturalmente y de esta manera comprender como se crea la enfermedad y como se genera el cáncer.
La célula es la base de nuestra vida, es la unidad anatómica fundamental de todos los organismos vivos, funciona gracias a la producción de energía celular mas conocida como Trifosfato de adenosina (ATP), esta molécula se produce por medio de múltiples reacciones bioquímicas en donde participan el oxígeno y los nutrientes.
El primer paso para garantizar la vida es respirar. Es lo primero que hacemos al nacer: tomar oxígeno y después comer, ese es el orden natural, cuando la producción del ATP es insuficiente, el cuerpo compensa, y su consecuencia es la inflamación en primera instancia.
Si esta limitación continúa, pasamos a la degeneración celular. El problema radica en que esta degeneración se mantiene de manera permanente, es decir, se altera la información básica de nuestras células y se transfiere a las moléculas nacientes, así se crea el cáncer y la mayoría de enfermedades degenerativas.
Oxígenos para prevenir el cáncer
La mejor medicina es la prevención, en ese sentido la molécula que más nos ayuda a lograr este objetivo es el oxígeno por varias razones:
- Es la materia prima mas importante para la producción de energía
- Neutraliza la acidez generada por la inflamación crónica
- Restaura la información que se altera en nuestras células
- Recupera adecuadamente la reproducción celular (las células nuevas nazcan sanas).
En ese orden de ideas también es una de las mejores estrategias de tratamiento para los pacientes que se están enfrentado a esta enfermedad. La mejor parte de la historia es que la podemos implementar en cualquier estadío ya que, en términos prácticos, lo podemos hacer antes de iniciar los tratamientos convencionales (quimio y radio), también durante estos tratamientos o cuando ingresamos al campo paliativo. El efecto en cada una de los estadíos del cáncer es diferente.
Antes de iniciar tratamientos convencionales
El cáncer altera el funcionamiento natural de nuestro cuerpo, esta enfermedad tiene la capacidad de hacer que todo gire en torno a ella, y exceptuando ciertas tipologías crece a una velocidad más rápido de lo que el cuerpo es capaz de regenerarse, cuando empezamos a oxigenar logramos cambiar esa dinámica, es decir el cuerpo se convierta en un ambiente poco favorecedor para el cáncer, eso significa que la enfermedad empieza a perder capacidad de crecimiento por lo tanto pierde fuerza, simultáneamente logramos activar nuestro sistema inmune de tal manera que los sistemas endógenos que tenemos para el control de los tumores empiece a funcionar de una manera adecuada, y nuestras células sanas al estar bien oxigenadas van a soportar los tratamientos convencionales.
Con tratamientos convencionales
Adicional a los beneficios ya anotados, la adecuada oxigenación en el cuerpo permite que la quimio sea mas selectiva. Esto se logra porque las células adecuadamente oxigenadas poseen los mecanismos necesarios para enfrentar la oxidación (efecto base de las quimioterapias) y esto significa que la recuperación y la tolerancia a estos tratamientos es mejor.
Cuidados paliativos
Este tipo de pacientes son aquellos quienes no son candidatos para una terapia con fines de recuperación, ya el avance de la enfermedad es tal, que lo más humano es acompañar al proceso de morir. Lo reconfortante de oxigenar el organismo en este punto, es observar como nuestros seres amados llegan a ese momento de su muerte con una excelente calidad de vida, consiente de si mismos ya que la velocidad de crecimiento del tumor disminuye y nuestras células reaccionan.
Lograr todo esto solo es posible si estamos conscientes como pacientes que sanar es un efecto activo, es decir el paciente es protagonista y es indispensable que este dispuesto a hacer los cambios necesarios en sus estilos de vida, en su alimentación en su sentir.
Escríbenos para que, independiente de la etapa en la que te encuentres tú o ese ser que tanto amas, podamos ayudarte con todo el amor del mundo, a sobrellevar esta enfermedad.