Importancia del empoderamiento y la responsabilidad de nuestra salud y condición física.

La Real Academia de la Lengua Española (vínculo externo a la RAE*) establece que la palabra empoderar significa: adquirir poder e independencia para mejorar una situación.

En el contexto de salud esta palabra tiene mucho sentido, ya que cada acción cuenta para sumar o para restar y cuando hablamos de cada acción implica el cuidado de las emociones, la respiración, la alimentación y el actuar en pro de qué nuestro organismo viva en óptimas condiciones, aunque  esto no necesariamente  este  alineado  con nuestros deseos y, en este  nivel de conciencia, es un requisito que nuestra voluntad sea mayor que nuestros  deseos.  

¿Es posible llegar a convertirnos en nuestros propios médicos?

Así es. Cuando somos capaces de escucharnos y de sentirnos, empezamos a comprender cuales son las decisiones que hay que tomar para resolver ese conflicto, qué alimentos es mejor evitar porque nos genera cierta reacción, que tipo de actividad física vibra con nosotros para que se convierta en un momento de escape o de regulación ante la cotidianidad de la vida, solo que es indispensable EL AMOR propio para llegar a hacerlo y lo resalto así, con mayúscula, porque EL AMOR es la energía que es capaz de sacar lo mejor de cada situación, entonces ese amor propio a mí mismo va ser más grande que el antojo o de aquel “pecadillo” que a punta de auto indulgencia se convierten en actos cotidianos.

Amor y autoconocimiento para aprender a cuidar nuestro organismo.

Solo podemos amar aquello  que  se  conoce,  esa es un ley  inquebrantable, entonces el camino de amor propio empieza por aprender a conocerse, escucharse, sentirse y parar si es necesario, inspirar, mirarse  al  espejo  sin prejuicios pero con la convicción  de  respondernos siempre con la verdad a interrogantes cómo:

Cada una de estas preguntas y posiblemente otras más, son indispensables para  empoderarnos de nuestra salud así como de nuestra vida en su totalidad.

¿Cuántas horas se consideran necesarias entonces para tener un buen sueño?

Se oyen muchas cosas por ahí… que 6, que 8. Lo cierto es que no hay un número de horas estándar que se consideren necesarias para un buen sueño. Cada persona requiere diferentes tiempos, incluso esa necesidad puede varias en una misma persona en cada etapa de la vida.

Empoderamiento y automedicación, ¿qué diferencias hay entre ambas?

Empoderarnos de nuestra salud es sin lugar a duda tomar las riendas de nuestra vida. Es aceptar lo que somos, con lo bueno, lo malo, nuestra luz y nuestra oscuridad, pero con coherencia. Cuando empezamos a comprender quienes somos, el siguiente paso es actuar acorde a este descubrimiento, es decir, aceptar lo que hay y lo que no se puede cambiar y transformar lo que necesita ser transformado.
La automedicación es como en su nombre esta implícito, la persona decide lo que toma para calmar un síntoma, ósea si me duele, tomar un analgésico o un antinflamatorio. Esta es una decisión muy importante pero hay que aprender usarla, con esto quiero decir que en pleno siglo XXI ya no hay necesidad de aguantar dolores, o de estar a merced constante de un insomnio, no descartemos esa idea de inmediato. Cuando hay que tomar alguna pastilla para evitar un dolor hay que asumirlo con sabiduría siendo conscientes de que cuando automedicación se convierte en la cotidianidad, hay que parar, inspirarnos y empoderarnos.

¿Qué señales nos da nuestro organismo cuándo está enfermo?

Hay muchas que dependen del nivel de deterioro al cual nos estamos enfrentando, en general si te hace sentir angustia o duda ahí no es. Si tu cuerpo reacciona con cualquier malestar eso no es, a grandes rasgos esas son las señales; sin embargo hay ciertos síntomas como el cansancio, el mal sueño, el agotamiento, los dolores de cabeza, la no respuesta a la medicación, el malestar o la irritabilidad emocional, la piel seca, la intolerancia alimentaria, dolores musculares o articulares cada vez mas frecuentes, y en general la sensación de no estar al 100% son unas señales muy claras de empezar a revaluar.

¿Cómo empoderar a un paciente?

La respuesta puede parece un poco extraña pero la mejor forma de empoderar a un paciente es tratándolo con amor. Viendo más allá de esa persona que se sienta frente a nuestro consultorio con algún malestar o síntomas. Si amamos a nuestros pacientes, a nuestro trabajo y a lo que hacemos por nuestra Comunidad, podremos proporcionarles la confianza, la seguridad y la capacidad de elegir lo que es mejor para cada uno de ellos.

En Oxivida estamos plenamente convencidos de que el amor como el hecho de desear el bien,  es la clave para sanar, para vivir y para empoderar a una persona de su salud, que además termina siendo muy beneficioso para ambas partes, la médica y la del paciente porque el resultado será una combinación de la parte clínica recomendada según cada caso  pero también del cambio de mentalidad, de costumbres y de ideas arraigadas que el paciente deberá dejar atrás si de verdad, desea tomar el control de su vida y sanar.